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Ciertamente, dulce es la primavera. Que no te engañe el crujir de las hojas. No te distraiga la sed de sol. Todo lo cubrirá el aroma, el aroma a sangre que emana de tus caricias. Pero cuando menos me doy cuenta, ya no estás, ya te has ido; y me haces pensar "Sin ti, ¿Cómo he resistido?". ¡No te acerques, cruel verano! ¡No me tientes con tus encantos! Por que llegarán Otoño, Invierno, y muchos más, y luego volverá mi amor, mi primavera, a salvarme de tus garras. Y con los años pasarán colores, rojo y blanco y nada más, pero solo el de tu piel recuerda mi pecho. La puerta

Cuando mengüe la luna, vendré a visitarte, y te traeré rosas blancas. Cuando baje la marea, iré a recibirte, y te llevaré rosas blancas. Y así como el viento, que no espera ni olvida, saldré a tu encuentro, te llevaré a mi mundo, un lecho de rosas blancas. Y así como el amor, que no ve un final, no podré volver a verte, preciosa flor blanca.

Al niño de mis ojos y mi razón de existir, Takahashi Misaki: Te amo. Bien lo has dicho "Nunca me será sencillo decir lo que siento, porque descubrí que esas dos palabras llevan consigo un sentimiento sin límites" , y tienes toda la razón. Yo, que te lo digo a diario, lo sé muy bien. A veces me fastidia que seas tan honesto; y todo es mi culpa, de mi manera de ser, siempre sereno e impasible, cuando en realidad soy extremadamente débil, y frágil en toda la extensión de la palabra. Luego me pregunto, ¿eso me convierte en un cobarde? Herir y ser herido, al final, ese es el verdadero prop&

Necesidad, dolor, pesar, te atrapan. El vacío me ha arrastrado al pasado y a los tiempos felices, cuando tú estabas a mi lado y la soledad no me invadía. Cuando mi corazón era puro.  Sin ti no soy la misma, sé muy bien que nunca te llegarán mis palabras, pero eso ya no importa, nunca importó y jamás importará.  Me pregunto como se sentiría seguir adelante, olvidar, sanar mis heridas, pero no se puede llegar a la meta sin dar el primer paso. Al fin y al cabo, sé que algún día estos sentimientos se extinguirán, como el color de una foto, o la tinta de un letrero d

Oscuridad, mi alma,  transparente. Mira a través de ella  ¿Qué es lo que ves? ¿Un color fijo? Mi alma,  tal vez sea transparente, pero refleja lo que está cerca mío. Nunca podrás ver su verdadero color. Mi corazón, un libro abierto. Léelo las veces que quieras. Pero jamás podrás descifrar sus enigmas.